¡Celebremos el derecho a alimentarse sanamente!
Alimentarse sanamente también debe ser un derecho y un deber que toda persona puede exigir y debería cumplir. No hay mejor batalla contra una vida sana que alimentarse sanamente y para ello, en el proyecto de “La Escuela a la Siembra de un Nuevo Mundo” decidimos intentar vivirlo y hacerlo. De este modo,este año vivimos la semana de la alimentación en las cuatro sedes del centro Educativo el Palmar. 245 estudiantes participaron de diferentes actividades. Alrededor de 70 padres de familia y los trece docentes.
A finales de mayo celebramos esta semana, con el fin de recordar la importancia de alimentarse saludablemente con los productos del territorio. Entre alegría, artesanías y danzas los estudiantes y maestros disfrutaron de una diversidad de actividades en torno a la alimentación saludable, el no uso de químicos en cultivos, la importancia de los mercados campesinos, el valor de la cooperación en el campo, las semillas nativas, la importancia de saber leer las etiquetas de los alimentos, el impacto del exceso de azúcar en la alimentación y la soberanía alimentaria.
En la hermosa sede de los Andes, los niños y su dinamismo los llevó a la idea de hacer meriendas saludables para el encuentro, al igual que un trueque de semillas por ropa, el cual propusieron a los padres de familia e invitados. La mañana se dinamizó por la proyección de un cortometraje colombiano hecho por productores franceses: Semillas de un Nuevo Mundo “Graines d’un nouveau monde” que entre diálogo y risas nos ayudó a comprender el valor de la soberanía alimentaria.
En la sede Villa Colombia, los estudiantes y profesores vibraron con la cultura y el sabor del territorio. Todos estuvieron comprometidos en la decoración de los muros con mensajes alusivos a una buena alimentación. La actividad que marcó, fue la degustación de diferentes productos para reconocer los sabores del territorio y permitirse probar otras mezclas, otros olores y texturas hechos por los mismos niños, ¡qué delicia de innovación!. Entre toda la celebración no podía faltar la danza tradicional, interpretada por los niños de preescolar y primaria con los ritmos musicales de la gaita y el mapalé (Música tradicional).
Finalmente la sede Capiro y el Palmar se unieron para vivir estos días con un tono académico y cultural, gracias a las exposiciones y quiz sobre la alimentación saludable. El arte culinario y tradicional del territorio, llevó a los estudiantes y maestros a hacer recetas a base de productos locales, dando a conocer también su aporte nutricional. Al ser la sede El Palmar, una de las sedes más grandes, se pudo también debatir con los padres de familia, qué significa alimentarse bien en la escuela, a través de la lonchera escolar y las meriendas saludables.
Para cerrar con broche de oro se terminó con un concurso de dibujo y escrito sobre el tema alimentación saludable y con una presentación del grupo de danza “A todo Ritmo” que de manera participativa mostró desde la música tradicional de la gaita el aporte del mundo campesino a la producción de los alimentos sanos.